Dentro de los conceptos informáticos y recursos tecnológicos que se dan cita en el funcionamiento TI de las empresas los almacenes de datos tienen una relevancia fundamental. Conocidos en inglés con el término original “data warehouse”, estos almacenes se ocupan de agrupar datos determinados con los que las empresas tienen la oportunidad de adoptar decisiones que ayuden a su crecimiento. Dicho de otra forma es un informe en el cual se puede encontrar información exhaustiva que abarca todos los frentes del negocio, proporcionando una radiografía completa de lo que necesitamos saber sobre la empresa. En base a la complejidad de la empresa y de sus sistemas los almacenes de datos se dividen en varias unidades que ayudan a examinar la información de una manera más correcta.
Ventajas principales
Si tantas empresas han comenzado a sacar partido a los almacenes de datos está claro que no puede tratarse de un error o de una casualidad. Uno de los objetivos que se adoptan por medio de la introducción de este recurso en la empresa es permitir que los negocios tengan un mejor acceso a los datos que pueden ser necesarios. La información es amplia y exhaustiva, permitiendo que se utilicen estos datos en distintos procesos adoptados en la empresa con facilidad y una mayor sencillez de la que se disfrutaría sin los almacenes.
Otra de las ventajas está relacionada con la forma en la que las aplicaciones de la empresa trabajan mejor gracias al uso de los almacenes de datos. El motivo principal de ello es que estos almacenes tienen la oportunidad de realizar procesos de trabajo combinados, por lo que se simplifican los sistemas en este aspecto. Uno de los recursos que más agradecen las empresas es que las relaciones que tienen con los clientes se puedan gestionar de una manera más inmediata por medio de esta tecnología.
En último lugar hablamos de cómo los almacenes se pueden convertir en la herramienta que nos ayude a tomar decisiones con más inmediatez incluso en momentos en los que parece que no hay otra opción. Esta tecnología habilita otros procesos muy convenientes. Por ejemplo, pone a disposición de las empresas los informes de excepción, en los que se plantea una clara diferenciación que tiene en cuenta la lista de previsiones y los resultados definitivos que se han obtenido. Estos datos ayudan a ver cuál ha sido una tendencia para aprender de ella y actuar de una forma distinta en el futuro. También se pueden gestionar los informes que nos hablan de las tendencias, ayudándonos a ver en un ejercicio de análisis cuáles son los servicios o productos que mejor están funcionando a fin de aumentar el apoyo en este tipo de elemento.
Inconvenientes
Cualquier tecnología, por puntera y eficiente que sea, debe tener una contraposición, algún elemento que nos haga pensar que no se trata de un método definitivo ni obligatorio. Esto ayuda a crear equilibrio y a mostrar a las empresas que hay excepciones y casos en los que esta tecnología puede no ser la respuesta. Con los almacenes de datos podemos encontrar problemas variados que no tienen porqué producirse en todos los casos. Uno de los problemas es que no se trata de una tecnología elástica y que los costes de uso pueden llegar a crecer demasiado. Por otro lado, la obsolescencia es otro de los riesgos, dado que puede llegar demasiado pronto. Y hay casos en los que la efectividad de los almacenes de datos no se produce tal y como desearíamos. Hay veces en los que la respuesta que se produce ante una consulta proporciona una información escasa y reducida, poco útil para realizar un informe completo.
También es importante que valoremos que hay momentos en los que se puede producir confusión en el uso de estos almacenes, puesto que puede haber aspectos poco determinados. Esto lleva a que los equipos TI tengan que ocuparse de personalizar la experiencia, delimitar el papel que tenga el data warehouse de manera específica y exprimir sus recursos de forma que no se estén desperdiciando herramientas. Requiere implicación por parte de los equipos técnicos y es algo que tendremos que tener en cuenta, demostrando que los almacenes de datos se tienen que implementar con eficacia ante todo y con un análisis previo de los requisitos.