Windows gestiona la memoria disponible para obtener el mejor resultado, pero también es posible que tú mismo quieras configurar la memoria virtual para optimizar su uso.
Aunque es recomendable que no modifiques los parámetros que vienen por defecto, hay algunas situaciones en las que puedes aplicar algunas prácticas para optimizar y configurar la memoria virtual. Pero antes aclaremos los conceptos.
Conceptos relacionados
La memoria RAM (memoria de acceso aleatorio) es la memoria física que tiene el ordenador, es la que utiliza el sistema operativo para almacenar los datos que necesita tanto el sistema operativo como el software que se está ejecutando en el ordenador. Esta memoria es limitada y de alto rendimiento para lograr que el funcionamiento sea óptimo.
La memoria virtual es una extensión de la memoria física. Es la capacidad que tiene el sistema operativo de gestionar la memoria utilizando hardware y software.
Cuando un ordenador tiene ocupada toda la memoria física, el sistema operativo utiliza la memoria virtual para que todo siga funcionando. Para ello transfiere de forma temporal parte de los datos que estaban en la memoria RAM al almacenamiento en disco.
De esta forma, se pueden ejecutar programas que necesitan más memoria de la que hay disponible (como programas de edición, de modelaje, videojuegos) o se pueden ejecutar varios programas al mismo tiempo como si el ordenador dispusiera de más memoria de la que realmente tiene. Permite seguir trabajando con todos esos programas aunque tengas ocupada toda la memoria física.
Eso sí, debes tener en cuenta que al utilizar la memoria virtual, el ordenador se ralentiza considerablemente pues los datos del sistema operativo y de los programas que se están ejecutando se tiene que dividir entre la memoria virtual y la física.
Para utilizar la memoria virtual, el sistema operativo crea en el disco duro o unidad de almacenamiento asignada, un archivo de paginación o un archivo de intercambio . Este fichero contiene un número fijo de direcciones a los datos que necesita el PC para funcionar pero que no caben en la memoria física.
Aunque por defecto el sistema operativo se encarga de administrar automáticamente el archivo de página, también puedes configurarlo ti mismo.
4 mejores prácticas para configurar la memoria virtual y gestionar el archivo de paginación
- Mover el fichero de paginación a la unidad de almacenamiento más rápida. Cuando el ordenador dispone de varias unidades de almacenamiento, puede ser buena idea mover el fichero de paginación al disco más rápido para tratar de optimizar el tiempo de respuesta. Y si dispones de un disco SSD mejor todavía.
- Utilizar varios archivos de paginación. También puede ser interesante usar varios archivos de paginación divididos en dos o más discos físicos. El controlador de disco es capaz de procesar múltiples peticiones simultáneas para leer o escribir datos.
- No poner varios archivos de paginación en distintos volúmenes de un mismo disco físico. Si decides configurar la memoria virtual debes tener la precaución de no crear varios archivos de paginación en distintos volúmenes de un mismo disco físico. Si tienes creadas dos o tres particiones en un mismo disco, colocar un archivo de paginación en cada partición en lugar de mejorar puede ralentizar el funcionamiento del ordenador.
- Reducir el tamaño mínimo del archivo de paginación. En el caso de disponer de poco espacio en el disco duro puedes establecer un tamaño menor en el archivo de paginación. Pero si no tienes problemas de espacio en el disco duro no conviene que pongas un tamaño menor en el archivo de paginación pues podrías empeorar el rendimiento del sistema.
Conclusión
En este artículo hemos visto algunos conceptos importantes relacionados con la memoria, incluyendo la memoria virtual y el archivo de paginación. Y en relación con esto, hemos revisado 4 mejores prácticas interesantes que debes tener en cuenta si necesitas configurar la memoria virtual. Aunque no siempre es recomendable, puede que en algunos casos no tengas más remedio que hacer alguna modificación, y conviene tener en cuenta estas mejores prácticas.